domingo, octubre 30, 2005

La Sra. Patata visita a su sobrina Srta. Patatita

Por fin terminé mi huevito de crochet, tuve una tarde "libre" esta semana en la que me quedé sólo con Daniel y él se entretuvo jugando mientras yo hacía la labor. No me ha quedado del todo bien, pero para ser mi primer huevito no ha estado mal, estuve pensando mucho en la caracterización final que iba a darle, debido al color oscuro del hilo que usé, y se me ocurrió finalmente que podía hacerle un sombrerito estilo señora Patata y así quedó. Cuando Pablo lo vió estaba haciéndole los ojos (¡qué trabajitos!) y me decía "trae mami, trae, yo hago los ojos" a la vez que hacía ademán de quitarme el ganchillo.

Aquí van las fotos, no han quedado demasiado bien, la próxima vez será porque estos días están muy oscuros y al ser tan pequeño no sale con claridad. Las explicaciones para las que no las hayan visto ya están en el blog de Olivia-p, así le echan un vistazo a su Superhuevito.




A ver si encuentro el hilo de DMC para ganchillo, que parece que por aquí no abunda mucho, porque con el que trabajé no queda muy tupido; era muy fino y tuve algunos problemillas para trabajarlo.

viernes, octubre 28, 2005

Las "pastillas de colores" de Pablo

Comentando hace cosa de un mes el problema que teníamos con Pablo y el baño, que tuvo una época en la que no quería bañarse, mi amiga Menchu, también madre de dos bajitos que se llevan 20 meses, me contó que ella le compraba unas "pastillas de colores" que se echaban en el agua del baño y la ponía de colores. Ella les decía que hacía magia y los niños encantados. Nosotros dijimos eso de "con probar no pasa nada" y sí que pasó; Pablo no se resistió a la magia de colores y se metió en la bañera, el problema era luego sacarlo. Las pastillas se venden en Imaginarium, vienen en bolsitas de unas diez con colores rojo, amarillo, verde y azul, aunque para que dejen suficiente color hay que echarlas de dos en dos o incluso tres de un mismo color, dependiendo de la cantidad de agua.

Aunque han tenido mucho éxito en casa, Pablo ha vuelto a dar problemas para bañarse, no siempre es por no querer entrar en la bañera; a veces es porque quiere seguir bañándose o porque una vez que se baña con uno de nosotros quiere seguir bañándose con el otro. Ya hemos tenido que meternos en la bañera "obligados" porque sino no había manera de sacarlo a él. Otras veces aguantamos el chaparrón y dejamos que patalee hasta que se le pasa. Los fines de semana no hay problema porque sino se baña por la noche lo hace por la mañana, otra fuente de discusión porque puede "antojársele" bañarse dos horas después, cuando ya le toca irse a la cama. Y es que es el espíritu de la contradicción (a nosotros nos toca paciencia, mucha paciencia).

Lo de ir a comprar las pastillas o hablar de ellas ya es fuente de cachondeo entre nosotros porque imagínate oirle decir a tu hijo "quiero pastillas de colores" en pleno centro comercial. A ver si piensan que drogamos al bajito ;)!!


Esta foto la sacamos hace unos quince días, en la rambla de Santa Cruz, a Pablo le encanta este tren.

miércoles, octubre 26, 2005

Los avances de Daniel

Por fin puedo dedicarle unos minutos a internet y es que llevo unos días durmiendo poco; cuando por fin se duermen los niños casi lo hago con ellos porque las noches han sido algo movidas. Hemos pasado a Daniel al cuarto de Pablo y, salvo las primeras noches en las que no se despertó, todas las noches se despiertan un par de veces, menos mal que se van turnando y no lo hacen a la vez. Anoche mismo pasé de dormir a Pablo a acostarme con Daniel al sofá, más tarde con Pablo, y terminé nuevamente con Daniel a las seis de la mañana en el sofá hasta que se hicieron las siete y ya le preparé el biberón (no ha vuelto a mamar, ahora le da por morderme y no veas de que forma). Total duermo una media de cinco horas por la noche, así que aprovecho la siesta después de comer, Daniel se duerme y lo acuesto conmigo, así casi no se despierta y podemos dormir unas dos horas seguidas.

Daniel está hecho todo un bebé grande, es increíble que con sólo ocho meses y medio interactúe tanto con nosotros. Ahora le da por explorar la casa, no gatea sino que se desliza como los comandos esos del ejército, con los codos va dando "pasos" y empuja con los pies. De vez en cuando se pone a cuatro patas y se balancea de delante a atrás, como probando sus fuerzas para gatear. Lo dejo en el salón jugando, al rato lo oigo "refunfuñar" (hace unos ruiditos con la nariz respirando fuerte y la arruga) y asoma su cabecita por un lado de la puerta de la cocina como preguntando "mamá, ¿estás aquí?". Lo mismo hace si estamos su padre o yo en el baño.

Se mantiene sentado mucho rato, sin apoyos, aunque si intenta algún movimiento brusco todavía se cae hacia un lado, sí consigue ponerse boca abajo él solo. Le gusta que lo mantengan de pie e intenta dar unos pasitos. Lo he visto jugar con una miga de pan en el suelo intentando cogerla con dos deditos, cuando lo lo consigue se enfada y se queja, la busca, la vuelve a coger. Cuando está contento da grititos y puede pasarse un rato diciendo "papapapa .." o "abua, abua..."; lo menos que dice es mamá, para pena de la madre que se le caería la baba.

Lo que lleva peor es el dormir, y es que se mueve mucho y empieza a llorar a veces sin consuelo, otras sólo son unos segundos y vuelve a dormirse. Creo que le duelen los dientes, la mandíbula superior la tiene algo inflamada y ya se le notan los dientes, aunque lo más extraño es que uno de los más marcados es el colmillo derecho, que no le deberían salir todavía (hasta después del año).

Por lo demás es un niño muy alegre, le encanta mirarse al espejo, que le hagan muecas o cosquillas, sonríe si le cantas una canción (si antes no ha estado de rabieta claro) y come como un campeón. Dentro de unos diez días iremos otra vez al pediatra para la revisión de los nueve meses, está bastante alto, el otro día los vestí con una camiseta a rayas diferente aunque con tonos similares y una chica los miró deprisa y preguntó "¿son gemelos?" luego los miró mejor y se dió cuenta de que no eran iguales. Si puedo mañana publico unas fotos para que vean como están los bajitos.


Lo prometido es deuda, esta foto se la tomé esta mañana, en plena exploración de su territorio.

viernes, octubre 21, 2005

Mamás multitareas

Hace tiempo que lo sospechaba, pero no había tenido la confirmación hasta ayer por la mañana. Las mamás multitareas son aquellas que con el niño en un brazo hacen el biberón, que recogen los juguetes esparcidos por el suelo mientras hablan por teléfono y dan una receta de cocina, que mientras lavan los platos están cantando una canción de bebés y miran a su hijo, sentado en la silla y con cara de pocos amigos, haciéndole morisquetas para que se ría y se le olvide el cabreo, etc.

Cuando tienes dos o más hijos la multitarea se complica aún más porque puede que los incluya a los dos: hacerles cosquillas con una mano a cada uno para que no se pongan celosos, tomarlos en brazos, uno en cada rodilla, mientras estás sentada (porque de pie ya lo he hecho alguna vez y mi espalda no está para esos trotes), intentar calmarlos a la vez porque uno empieza a llorar y el otro le sigue, montarlos a caballito sobre la barriga para jugar "al paso y al trote", etc.

Sin embargo la confirmación me llegó ayer por la mañana: Daniel se despierta sobre las siete menos cuarto y le preparo el biberón, normalmente Pablo se queda durmiendo hasta casi las ocho (a veces tengo que despertarlo y otras se levanta él solo) y ayer fue de los días en que se despertó mucho antes. Estaba casi por empezar a darle el biberón a Daniel cuando él llegó y reclamó su papilla, se la preparo y se la dejo encima de una mesita-taburete que tenemos en el salón para que se la coma viendo los dibujos; le empiezo a dar el biberón a Daniel y Pablo me dice "te ayudo mami" lo cual quiere decir que le ayude a comer. A ver quien es la guapa que le despega el biberón a un niño cuando ha comenzado a mamar, por lo que tomé la cuchara por un lado para darle la papilla a Pablo mientras con la otra le daba el biberón a Daniel (con él en brazos por supuesto). Salí airosa del momento, menos mal que ellos se lo tomaron bien y no hubo quejas del "servicio".

Los problemas surgen cuando hay que dormirlos o están dormidos y se despiertan a la vez, ahí la multitarea no sirve demasiado y hay que echar mano del compañero.

martes, octubre 18, 2005

Patchwork en Tenerife

La semana pasada visitamos la séptima exposición nacional de la Asociación Española de Patchwork que se realiza este año aquí en Tenerife. Habían muchas muestras del patchwork que se hace en España, desde los motivos geométricos del patchwork seriado hasta verdaderas obras de arte en tela. Se exponían trabajos de gente de toda España, aunque al ser Tenerife la anfitriona la gran mayoría de obras eran de aquí.


Personalmente me encantan los quilts con diseños libres, es decir, los que muestran escenas, o paisajes. Realmente serían como cuadros pero en tela y hechos de retales. No me disgustan los dibujos geométricos, son también obras de arte, pero depende de la selección de las telas (colores) y muchos se repiten tanto que ya no sabes si lo has visto o no. Me encantó uno que mostraba a un grupo de mujeres cosiendo en una especie de terraza con muchas flores alrededor, y otro que mostraba en paneles las tradiciones canarias. Lástima que no saqué fotos, supongo que tampoco dejarían por lo de la "propiedad intelectual" de las obras.

Habían varios trabajos de mi profesora de patchwork y de sus alumnas, yo contribuí con un pequeño hexagono para una colcha realizada a mano.

Lástima que no funcione la página web de la Asociación porque seguro pondrían un reportaje fotográfico de la exposición.

sábado, octubre 15, 2005

Vuelta a la normalidad?

Parece que Daniel se ha recuperado del todo según el pediatra, le ascultó el pecho y le miró la garganta y lo dió por bueno. Menos mal, porque el brazo derecho se me estaba poniendo como a Popeye de tanto cargarlo; y es que estaba tan molesto que no podía dejarlo ni en el suelo, ni en la hamaca, ni en la silla (en la cuna ni intentarlo). Las noches también han sido moviditas, se relajaron por unos días y ahora es el insomnio el que hace su aparición y me tiene casi una hora dando vueltas alrededor de las cuatro de la mañana. Anoche fue a dúo, primero se despertó Pablo y media hora más tarde lo hizo Daniel, y allí estábamos los cuatro sentados en el sofá, con la luz apagada e intentando no dormirnos nosotros y ellos sin cerrar los ojos. Cuando consiguieron dormirse, Pablo conmigo y Daniel con su padre, eran casi las cinco de la mañana y el pequeñajo no tardó ni una hora en despertarse; así que amanecimos los dos en el sofá.

No he podido hacer nada en estos días, sobre todo porque si dormía a Pablo, le leo un cuento en su cama, me quedaba K.O. después y no había quién levantara cabeza. Además Pedro ha hecho unos cambios en el ordenador, más bien ha cambiado de ordenador porque el suyo dejó de funcionar, y no he tenido acceso al mío hasta hoy. Así que ahora intentaré ponerme al día leyendo mis blogs favoritos.

domingo, octubre 09, 2005

Daniel ya está mejor

Cuando ya nos la prometíamos felices, el bajito Daniel empeoró, el jueves tenía más fiebre, una tos espantosa, muchos moquitos y no dejaba de pedir que lo tuviésemos en brazos. Lo llevé al pediatra nuevamente y me dijo que tenía que darle antibióticos, unas gotas para los moquitos, unas gotas para la tos y que siguiera dándole el aerosol y el paracetamol para la fiebre. Salí bastante preocupada por la cantidad de medicinas, esa noche la pasamos fatal, primero Pedro se quedó hasta las dos de la mañana intentándolo dormir y luego yo hasta casi las cinco. Lo peor es que no quería que me sentara ni en el sofá ni en la mecedora, sólo quería que me paseara por el salón. Cuando veía que se dormía intentaba recostarme un poco pero era imposible, comenzaba a llorar desesperado y volvía a levantarme. Es agotador tener que moverse continuamente cuando una se está durmiendo, hasta en el palo de un gallinero en esos momentos. Menos mal que al día siguiente estaba mucho mejor, hasta quiso estar un rato en el suelo jugando, esa noche empezó a decir "papá y agua" muy emocionado, estaba como si le hubiesen inyectado algo, luego cayó rendido y no se despertó en toda la noche, cosa que le agradecí muchísimo. El sábado se levantó sobre las siete de la mañana y mientras le daba el biberón, me regaló un "mamá".

Parece que le han sentado los medicamentos, está muy contento, como si quisiera recuperar los días perdidos; y duerme sin despertarse cada diez minutos. Hoy se echó una siesta de casi tres horas, de la que tuvimos que levantarle porque pensábamos que no iba a dormir esta noche.

Durante los días en los que ha estado enfermo ha perdido algo de peso, sólo comía bien el pecho, y ahora parece que no lo quiere, ni tampoco el biberón. Supongo que será algo pasajero, esta noche probamos a hacerle una papilla y dársela con cuchara pero no tomó mucho. Mi pecho también se ha agotado, con tantos días sin descansar bien, parece que no se ha recuperado. Bueno, ocho meses de lactancia materna tampoco están mal, y Daniel crece bastante bien.

martes, octubre 04, 2005

Los bajitos enferman a la vez

Y es que cuando hay dos niños o más terminan por caer enfermos a la vez. A Pablo lo llevamos el viernes al pediatra porque tenía fiebre y la tos era bastante fea, y aunque en ningún momento perdió el ánimo, ni comentó que le doliese algo, las noches desde el jueves fueron complicadillas. A partir de las 3 de la mañana le subía la fiebre y casi deliraba el pobrecito. Le han mandado antibióticos durante una semana porque tiene placas en la garganta y un poco de otitis; ya no tiene fiebre pero está de un mimoso ... Porque el domingo por la noche su hermano Daniel cayó también enfermo, con una tos feísima, como de perro, algo de fiebre y una respiración muy agitada.

Nos asustamos un poco porque creíamos que podía ser un broncoespasmo, estuvimos a punto de ir a urgencias pero le pusimos un aerosol de Pablo y mejoró bastante (no recomiendo la automedicación pero ya tenemos la experiencia de Pablo con los mismos y Daniel ya lo había probado por lo que decidimos que no le iba a hacer daño y podía hacerle mucho bien). Sin embargo como no nos quedamos contentos, y es que cuando un niño se pone enfermo puede empeorar rápidamente en cuestión de horas, decidimos hacer "guardias". Pedro se quedó despierto hasta las 4 de la mañana, las dos últimas horas con Daniel en brazos, y yo lo relevé hasta casi las seis cuando consiguió dormirse y lo ví bien. Hoy lo llevé al pediatra y me dijo que era una laringitis, de caballo pienso yo, porque está muy ronco y casi no come porque tiene muy cerrada la garganta. Finalmente me recetó el mismo aerosol que yo le había dado, pero en una dosis mayor, y estoy esperando que sea la una de la mañana para darle su dosis, a ver si mejora rápido porque no nos gusta nada verlo así.

sábado, octubre 01, 2005

Pablo y los dibujos animados

Pablo, como todo niño, tiene sus dibujos animados o programas de televisión para niños preferidos. Ya todos saben de su afición por El Oso de la Casa Azul, además le gustan los Little People (por un dvd que regalaban en una caja de pañales!), los Teletubbies (se los ponían en la guardería), Winnie the Pooh (la película de Tigger), todos en dvd. En la tele suele ver en el canal Boomerang (tenemos un pack de televisión por cable, cablemodem y teléfono) a Tom y Jerry, la Pantera Rosa, Vickie el Vikingo, etc; los clásicos que veíamos nosotros cuando pequeños. No le hacen mucha ilusión los Lunis, pero sí los Fimbles, a veces ve Sinchan (cuando hacemos zapping y lo pillamos), y Doraemon. Los dibujos animados "nuevos", es decir esos de Eddie, Ed y no sé que más, Pokemón, Vaca y Pollo, etc. no le llaman nada la atención, si los ve dice eso de "Ese no, mamá, ése no" y se impacienta.

El otro día íbamos por Carrefour cuando vió una mochila, de ésas del cole, con una foto de Bob Esponja y su amigo (acabo de descubrir que se llama Patricio Estrella); me lo señala antes de que yo lo vea diciéndome "mira mamá el quesito amarillo". Me quedo mirando y como no sé a qué se refiere me voy hasta las mochilas hasta que lo veo, casi me parto de la risa. Hasta ayer mismo me dijo eso de "no mami, no, el quesito amarillo no" cuando haciendo zapping lo vió. Le suele gustar Tom y Jerry, a los que él llama "Tom y yiyi" y uno se queda pensando durante unos minutos, qué me estará diciendo este niño.