... seguiremos con mascarilla en casa. Los resultados de Daniel han sido levemente mejores que el lunes pasado, así que después de hablarlo entre nosotros, y aunque la doctora con la que hablamos nos dijo que si no había nadie constipado podíamos quitárnoslas, hemos decidido no correr riesgos y seguir con ella puesta. El viernes tendrá otro control y consulta para ver si ha remontado algo más.
Estamos un poco hartos de la mascarilla, el calor húmedo que hay estos días incrementa el agobio que supone tenerla puesta. Pablo también está un poco cansado, hoy fue su primer día de cole y cuando fui a recogerlo ya me preguntó si Daniel estaba en casa y nos podríamos quitar la mascarilla. No se lo ha tomado demasiado mal, porque no se ha parado a pensar; ya se quejará esta tarde.
Daniel evidentemente no podrá ir al cole hasta la semana que viene, y ya veremos si el lunes puede, no cantemos victoria antes de tiempo. Sus defensas están muy bajas aún para aguantar lo que se le viene encima, así que más vale esperar. Esta semana era la de toma de contacto, sólo tenía que ir una hora y media, y con la mitad de sus compañeros, hasta el viernes que irían todos los alumnos y la mañana entera. En cierto modo era bueno para que se fuera acostumbrando él y su organismo.
Esta mañana tenía la intención de sacarle una foto a Pablo entrando a su cole, pero se me ha pasado y luego al ir a recogerlo también, así que se tendrán que conformar con la del año pasado, en la que el primer día coincidió con el cumpleaños de una compañera y salió de clase de esta guisa:
Ya ha pasado un año y el estirón de este verano se nota, pero está muy gracioso!
Estamos un poco hartos de la mascarilla, el calor húmedo que hay estos días incrementa el agobio que supone tenerla puesta. Pablo también está un poco cansado, hoy fue su primer día de cole y cuando fui a recogerlo ya me preguntó si Daniel estaba en casa y nos podríamos quitar la mascarilla. No se lo ha tomado demasiado mal, porque no se ha parado a pensar; ya se quejará esta tarde.
Daniel evidentemente no podrá ir al cole hasta la semana que viene, y ya veremos si el lunes puede, no cantemos victoria antes de tiempo. Sus defensas están muy bajas aún para aguantar lo que se le viene encima, así que más vale esperar. Esta semana era la de toma de contacto, sólo tenía que ir una hora y media, y con la mitad de sus compañeros, hasta el viernes que irían todos los alumnos y la mañana entera. En cierto modo era bueno para que se fuera acostumbrando él y su organismo.
Esta mañana tenía la intención de sacarle una foto a Pablo entrando a su cole, pero se me ha pasado y luego al ir a recogerlo también, así que se tendrán que conformar con la del año pasado, en la que el primer día coincidió con el cumpleaños de una compañera y salió de clase de esta guisa:
Ya ha pasado un año y el estirón de este verano se nota, pero está muy gracioso!
El viernes llegara enseguida, ya veras, es mejor prevenir que curar.
ResponderEliminarPablo sale graciosisimo en la foto, es normal que se nos pasen a veces cosas así, vamos a mil.
Muchas gracias por apsar por mi blog. Besos
un cumple al empezar el cole? jeje, a veces lo llevo fatal, el niño come pésimo, ni verdura ni fruta, lo primero se lo doy en sopas y potajes, lo segundo en zumos, a veces come manzanas... pues a veces tiene hasta dos cumples a la semana, menos mal que ahora solemos mandar alguna fanta y un bizcocho o dos pero caseros.
ResponderEliminarYa nos contarás que tal, te leemos.
Aunque hoy es lunes y lo vemos lejos, el viernes por suerte está ahí...qué pronto empieza ahora el cole en mi época no empezábamos antes del 15, tú bajito mayor simpatiquísimo!
ResponderEliminarPor cierto, no sé si te había dado las gracias por pasarte por mi blog, en todo caso: muchas gracias, has sido muy cariñosa. Un beso.
Vaya... pobrecillo Daniel... Pero bueno, ya verás que la próxima semana va a estar mejorcillo y podrá empezar en el cole, que seguro le hace mucha ilusión. Ánimo!
ResponderEliminarBuen comienzo de curso!!!
ResponderEliminarLo bueno chicas, es que Daniel está de un humor estupendo, salta, corre, se pelea con su hermano y no nos deja parar ni de sol a sombra. Todo lo lleva por dentro.
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