La visita al médico

... el viernes no nos dejó buen sabor de boca. Seguimos con mascarilla, sin cole evidentemente, hasta el próximo miércoles que le hacen un nuevo control. Sus defensas han subido un poco, pero no lo suficiente, de 400 neutrófilos el lunes han pasado a 500 este viernes. Han comenzado de nuevo con la quimio, y unas vitaminas de ácido fólico porque lo tenía algo bajo. La médula no está muy trabajadora y no fabrica células defensivas como lo debiera hacer, por un lado mantiene la leucemia a raya, pero por otro deja su cuerpo a expensas de microorganismos varios que también pueden hacer mucho daño en un momento determinado por lo que el cole tiene un riesgo elevado. Ya veremos que nos dicen nuevamente el miércoles.

Los bajitos no están muy intranquilos, aunque Pablo lo primero que preguntó cuando lo fui a recoger el viernes fue si ya no teníamos que utilizar la mascarilla, a mi respuesta de que el médico había dicho unos días más contestó: "Jopeta, todavía la mascarilla" pero no insistió. En casa si estamos más aburridos de ella, Daniel se la pone a veces para estar en la misma habitación cuando comemos, porque no le gusta nada estar solo en otra para comer, prefiere que terminemos nosotros o el hermano para empezar él.

Mañana lunes, es día de fiesta municipal para Pablo pero yo trabajo así que se quedaran en casa los dos con Pedro. Las clases oficiales, con los alumnos, empiezan el miércoles aunque con un horario especial hasta Octubre. Ya empiezo a prepararme las clases y estar pensando en lo que tengo o puedo hacer con los alumnos, así que mi cabeza está más dispersa. Sigo trabajando en un UFO, cuando tenga una foto de lo que llevo hasta ahora se las muestro porque tardará un rato, es un cuadro a punto de cruz que lleva parado bastante tiempo y con el que avanzo a ratitos. No quiero dejarlo, porque necesito hacer cosas diferentes, no a la misma rutina de siempre cuando trabajo.