A vueltas con el lumbago

Parece que esta vez no es incipiente, viene para quedarse unos días. Ayer por la tarde y de repente, iba a sacar un libro para Daniel de su armario, me dió el temible tirón. De inmediato me tomé un calmante y me acosté en el sofá, porque los bajitos estaban alrededor mío y no podía hacer otra cosa. Cuando intenté levantarme unos cuarenta minutos después seguía igual así que preparé las cosas del baño de los niños y dejé a Pedro a cargo de la situación mientras yo me tomaba un relajante muscular y me iba a la cama (eran las siete y media de la tarde). Aproveché para leer unos minutos, hasta que hiciera efecto los calmantes y a dormir. Esta mañana he notado la zona un poco cargada, después de irse los niños a la guardería con Pedro me he puesto a hacer una ensaladilla rusa para comer, y de nuevo me iré a la cama con el "dopaje" puesto, a ver si esta tarde estoy mejor para estar con los niños porque desafortunadamente a clase de patchwork no se me ocurre ir con el lumbago, que sólo coser o cortar telas pueden hacer que "reviva".



Llamaré a Bettina para ver si me cambia el día y puedo ir el martes por la mañana, si no hay mucha gente igual voy. De todos modos les dejo una foto de como quedará la colcha de Pablo en su cama, aún le falta el acolchado pero no variará mucho, al menos en fotografía. Me voy a teminar la ensaladilla para irme al catre. Ciao!